Las pasadas vacaciones habíamos programado pasar varios días de relax en un complejo lleno de actividades, pero sobre todo, piscinas. Lo ideal habría sido no tener que llevar el móvil encima, pero un importante asunto me lo impedía, así que lo primero que pensé, fue cómo protegerlo de posibles salpicaduras de agua.
Consultado el asunto con algunos compañeros, no parecía preocuparles demasiado dado que en algunos casos, simplemente no lo llevaban encima para disfrutar del baño sin preocupaciones o lo llevaban dejándolo escondido entre la ropa, bolso o similares.
Supongo que me habría preocupado menos con un móvil de contrato que me hubiera entregado la operadora o la empresa a coste 0 €, pero en éste caso, sólo disponía de mi nuevo smartphone. Así, que no satisfecho con las opciones anteriores, me dediqué a bucear por internet limitando la búsqueda a fundas de protección para el agua y concretamente para un iPhone 5.
El problema de buscar por internet es que a menudo encuentras demasiadas cosas, muchas de ellas probablemente inútiles para lo que pretendes o de baja calidad y con frecuencia con datos insuficientes para tomar una decisión, por lo que hay que recabarlos de distintas fuentes y de distintas opiniones de usuarios.
Después de varios días de búsqueda e ir descartando fundas tipo bolsa para llevar en el cuello, fundas desechables que envuelven el iPhone con una lámina impermeable, carcasas supuestamente impermeables pero sin evidencias de ello o fundas “milagrosas” que dejan la pantalla al descubierto para poder utilizarla incluso debajo del agua, me decidí por una funda funda para iPhone5 resistente al agua denominada “Amphibian” de Proporta.
Esta funda lleva varias piezas que envuelven el iPhone incluida una tapa que se atornilla sobre una envolvente que incluye una junta de goma que garantiza que no pueda entrar el agua; hay varios vídeos al respecto y aunque en principio mi intención no era meter el móvil dentro del agua, sino protegerlo de salpicaduras, después de verlos y leer la información del fabricante pensé que era segura incluso para utilizarla dentro del agua.
El fabricante afirma que puede soportar una profundidad de hasta 3 metros, suficiente para una piscina convencional; de todos modos al llevar una protección de material plástico impermeable, una vez dentro del agua la pantalla deja de ser táctil y lo único que se puede hacer es grabar vídeo habiéndolo activado antes de sumergirlo en el agua. Obviamente, por si acaso, el propio fabricante recomienda probar la funda antes introduciendo un pañuelo de papel fino dentro; si después de haber sumergido la funda al abrirla y sacar el pañuelo, si está totalmente seco se puede tener la tranquilidad de que la funda es estanca y protegerá perfectamente tu preciado iPhone 5.
Antes de meterlo en la piscina, hice varias pruebas sumergiendo el móvil en el lavabo, el fregadero y la bañera, comprobando que al sacarlo de nuevo de la funda estaba completamente seco.
Por fin llegó el gran día y mi hija estaba ansiosa por hacerse fotos y vídeos debajo del agua; yo, a pesar de todas las pruebas, seguía receloso. Finalmente me decidí y comprobamos que no había manera de hacer fotos pero sí pudimos grabar vídeo.
En definitiva, creo que es una buena opción desde luego para proteger del agua el iPhone 5; incluso, los más osados pueden grabar vídeos debajo del agua; también es recomendable para evitar que se nos llene de polvo o de arena, por ejemplo; no estando debajo del agua se puede utilizar perfectamente la pantalla y todas sus funciones, excepto conectarle los auriculares; si se trata de escuchar música en la playa hay otras opciones mejores.
Precio “Amphibian” de Proporta: 35 €
