5 consejos para elaborar la pizza perfecta

Acabo el mes de mayo para darte 5 consejos para elaborar pizza perfecta que van a darte la fórmula para triunfar dentro y fuera de casa.

A menudo, se engloba la pizza dentro del grupo de comida guarrindonga y se la tilda de fast-food y poco saludable, pero más allá de franquicias de comida rápida y grandes cadenas sin alma ni corazón, hay un maravilloso mundo de luz y de color. Y es que la pizza, bien elaborada, puede ser un plato nutritivo, completo y saludable. 

Seguramente, después de leer este primer párrafo habrá quien esté soltando espumarajos por la boca mientras le gira la cabeza al más puro “Exorcist Style”, mientras piensa en la hinchazón que tiene después de comer pizza y ese reseco, que hace que te estés levantando cada poco de la cama si has cenado pizza.

MIS 5 CONSEJOS PARA ELABORAR LA PIZZA PERFECTA

Repetimos: descartemos todas las pizzas industriales y de cadena rápida ¿Por qué? Porque no cumplen ninguno de los consejos que voy a darte para comer una pizza saludable.

Saca el boli, que empiezo:

1. EL SECRETO ESTÁ EN LA MASA: ELIGE HARINAS SIN ADITIVOS

Es importante gastarse unas perrillas más en una buena harina libre de aditivos que no afecten a la fermentación ni interfieran con tu flora intestinal. En ello es experto Cristian Giorgita, propietario de la Pizzería 22.2 Gradi en Zaragoza, y maestro pizzero a quien he consultado para la preparación de este artículo.

Él recalca lo importante que es partir de una buena harina, libre de cualquier aditivo o enzima y por ello, él recurre a comprar la harina en Italia donde existe algo similar a una “Ley de la pureza” para la harina.

2. SEGUIMOS AMASANDO: MEJOR PREPARAR LA MASA CON MASA MADRE

Elabora tu masa con tu propia masa madre y olvídate de los “polvitos de hornear” o la levadura química. Y no sufras si has intentado tener masa madre y se te muere el tamagochi: hoy en día, muchas panaderías te venden masa madre, incluso seca lista para rehidratarla. Ya pruebas y me cuentas cuando veas el resultado.

3. EN LA FERMENTACIÓN RADICA EL MISTERIO

El problema que comentábamos anteriormente sobre las pizzas que te hinchan y te dan un reseco horroroso, radica en que no han tenido una fermentación suficiente, por lo que cuando consumimos esa pizza, nuestra flora intestinal se vuelve “to loka” mientras esa masa fermenta en nuestro aparato digestivo.

La solución pasa por las fermentaciones largas, reposadas y controladas. En este tiempo, pasan cosas maravillosas en la masa y las levaduras trabajan sin descanso descomponiendo algunos de los nutrientes de la harina haciéndolos muchísimo más digestibles para nosotros. En este tema, Crisitian también insiste. Mucho.

4. USA PRODUCTOS DE TEMPORADA Y A PODER SER, DE KILÓMETRO CERO

Usar estos productos, te garantiza muchas cosas, entre otras, consumir los alimentos en su estado óptimo de maduración con todo su aporte nutricional íntegro, sin contar con que su consumo es medioambientalmente, mucho más responsable.

Por cierto: la piña, ni es un producto de temporada, ni de Km.0. Gracias.

5. UN HORNEADO ADECUADO, ES LA GUINDA DEL PASTEL

Cuando ya tienes tu pizza, recuerda hornear adecuadamente, al tiempo y la temperatura adecuada según el tipo de masa. Las masas poco horneadas, son indigestas y si están horneadas en exceso… te puedes jugar algún diente.

Y con esto, ya puedes preparar en casa, o buscar un establecimiento en la ciudad, que cumpla con todo lo dicho. Eso sí ¡ojo!, ten en cuenta que la pizza aunque sea saludable, no deja de suponer un gran aporte de hidratos de carbono y no nos podemos alimentar única y exclusivamente de pizza.

RECUERDA: el secreto para una buena alimentación, es consumir una dieta equilibrada y variada en la que predominen frutas, verduras, legumbres…