Darío, natural de Salamanca, arquitecto de vocación e inquieto de profesión, se encontró con el mundo del pan y masas fermentadas hace cosa de cinco años en Coruña, con resultados que él mismo define como catastróficos. No fue hasta su estancia en Austria donde descubrió muchísimos tipos de pan que le invitaron a no tirar la toalla.
Fue al volver a España en 2013 cuando se tomó en serio su afición, quizá su mente analítica y sus ganas de entenderlo todo (y por qué no, su perseverancia) hicieron mucho por la mejora de su técnica, pero sin nunca perder el norte: Darío sabe que en el mundo del pan no está todo dicho ni escrito. Por aquel entonces trabajaba para un restaurante y el bichito de la masa madre empezó a picarle, tanto que empezó a soñar…
De ese sueño nació Panàdarío, un obrador artesanal donde encontrarás panes con todo el sabor de antaño, hechos con mucho tiempo, masa madre y cariño. Y es que ahora que parece que el pan está cobrando su verdadero valor en nuestra alimentación, estos sueños son los que te permiten disfrutar de productos de muy buena calidad, con materias primas sinceras y respetando los procesos y el medio ambiente.
Darío empezó repartiendo su pan a grupos de consumo, restaurantes y participando en ferias de productores ecológicos. Usa harinas Roca, de muy buena calidad y con la certificación que garantiza su producción ecológica, es por ello que los panes que produce en su obrador van a llevar un valor añadido.
Con mucha paciencia y trabajo (tanto propios como de familiares y amigos) por fin el pasado 28 de noviembre, Panàdarío inauguró el obrador en el barrio de la Guindalera de Madrid, dentro del distrito de Salamanca y muy cerquita de una de las grandes calles de la zona, Francisco Silvela. Es un barrio bonito y acogedor, y el local está situado entre dos calles peatonales dando un ambiente relajado y sin duda dominical al mero hecho de visitarlo.
¿QUÉ ENCONTRARÁS EN PANÀDARIO?
Tienes la hogaza clásica de trigo blanco (3,8 euros la pieza de 750 g), la multitarea: lo mismo vale para empujar el huevo frito que para un bocata de media mañana o el desayuno. Lleva un 75% de trigo blanco con un toque de trigo integral y de centeno para darle más alegría; sin duda, es la mejor opción para neófitos en este mundo del pan con masa madre.
La opción integral (4 euros la pieza de 750 g) te la recomiendo si te gusta el sabor del cereal en todo su esplendor, ya que al conservar más partes del grano se gana en aroma y en sustancias nutritivas como ácidos grasos esenciales y vitaminas B y E.
Si eres de los que aparte de sabor necesitas textura y mucha, mucha energía, entonces tu pan es el multisemillas (4.3 euros la pieza de 750 g). Es un pan enteramente de trigo blanco con algo de integral y centeno, pero con el añadido de semillas como lino dorado, sésamo, semillas de amapola, pipas de girasol, pipas de calabaza y lino marrón. Aquí las “pizcas” no están para disimular un mal pan, aquí la masa y las semillas se potencian mutuamente para dar como resultado un panaco de sabor impresionante que te mantendrá sin hambre hasta el almuerzo.
Ahora, que si quieres retos, prueba con su centeno integral al 100% (4,8 euros la pieza de 750 g), fermentada con una masa madre de 20 horas de maduración, eso hará que disfrutes de un pan de larga duración, como los de antaño, cargadito de sabores que te recordarán al cacao y al café.
Por supuesto, no puede faltar en Panàdarío un pan de espelta (5,3€ la pieza de 750g) para que reivindiques el cultivo de los trigos antiguos. No es sólo cuestión de volver a nuestros orígenes, está realmente buena y además es más nutritiva que el trigo convencional.
Tienes la posibilidad de acercarte a reservar, llamar por teléfono o incluso realizar una reserva a través de su web.
MUCHO MÁS QUE OFRECERTE …
En Panàdarío habrá sobre todo pan, pero progresivamente te encontrarás otros productos: dulces y masas saladas como pizzas o empanadas. También podrás obtener de otros pequeños productores (algunos de ellos ecológicos) que Darío conoce, productos como miel, cerveza, mermeladas…
Panàdarío no sólo está pensado para que puedas surtirte de buenos panes: también es un espacio donde disfrutarás de exposiciones fotográficas, charlas y ejercicios de divulgación del buen pan y buenas prácticas de alimentación para hacer de éste un mundo mejor: soberanía alimentaria, slow food,… como ves, Darío busca el compromiso y la satisfacción a todos los niveles, y busca ser un centro de referencia en su barrio donde los vecinos estén cómodos y crear una comunidad concienciada y con inquietudes acerca del mundo del pan.
De momento te encontrarás sólo con el obrador y el despacho de pan, pero todos esperamos que a Darío le vaya realmente bien y pueda evolucionar su local en un lugar multidisciplinar donde puedas disfrutar de un pequeño bistró con terraza, un sótano con material de lectura panarra y lugar donde podrás disfrutar de infinitos talleres para niños y adultos, para que tú también disfrutes de la magia del pan casero. ¡Quizá con el tiempo surjan eventos específicos, como noche de pizzas los sábados!
Si crees que este proyecto merece la pena, ¡no lo pienses! Ayuda a Darío con su sueño; disfruta de su buen pan, y si te ves motivado, hasta puedes colaborar en el crowdfunding para que su obrador crezca.
+ INFO SOBRE PANÀDARIO
Dirección: Alonso Heredia, 25 – Madrid