Seguimos con la degustación de los vinos italianos que recibí hace unos meses. En esta ocasión, lo hacemos con el Pinot Nero en la Toscana es, de algún modo, hablar de rebeldía y elegancia a la vez. Lejos de las etiquetas clásicas de la región, donde el Sangiovese manda con voz firme, Borgo Macereto se atreve a interpretar una variedad difícil y delicada, moldeándola bajo el carácter único de estas tierras.
El resultado es Borgo Macereto 2021 Pinot Nero IGT Toscana, un vino que juega en esa frontera sutil entre la sobriedad borgoñona y la exuberancia del Nuevo Mundo. Fresco, vibrante y con una personalidad propia, consigue sorprender sin perder esa facilidad de trago que lo hace tan disfrutable en la mesa.
Un vino con personas detrás
Quiero destacar la labor del sumiller que me acompañó en esta cata, porque su sensibilidad al describir aromas y texturas me permitió apreciar matices que sola, podrían pasar desapercibidos. Sus palabras dieron forma a esta ficha y a la experiencia que hoy comparto aquí.
Y, como en mi primera reseña con el Barolo, no puedo dejar de mencionar a Pamela Bicchi. Ella es el puente que hace posible descubrir vinos como este. Con ella, las botellas no viajan solas: viajan con historia, con pasión y con la certeza de que detrás hay un trabajo bien hecho.
La bodega Borgo Macereto
Borgo Macereto es un proyecto relativamente joven en el panorama vitivinícola toscano. Nació en 2014, cuando la familia Foscarini adquirió una finca en la zona de Rufina, en el Alto Mugello, al noreste de Florencia. Desde el principio apostaron por un enfoque orgánico y de pequeña escala, con una superficie que hoy ronda las 6 hectáreas de viñedo.
Su filosofía combina respeto por el entorno y apertura a la innovación. Aunque están en pleno territorio del Chianti Rùfina DOCG, han decidido experimentar con otras variedades menos tradicionales como Pinot Nero, Sauvignon Blanc, Viognier, Moscato o Incrocio Manzoni.
El clima fresco y la altitud de la zona ofrecen condiciones ideales para vinos elegantes, de acidez marcada y gran frescura, lo que convierte al Pinot Nero en una apuesta valiente pero coherente.
Su primer vino fue Incipit 2016 IGT Toscana, que recibió 92 puntos de Falstaff, situando a la bodega como una finca boutique con ambición y calidad reconocida.
Borgo Macereto 2021 Pinot: Nota de cata
Este Pinot Nero sorprende desde el primer momento. En la copa luce un color cereza picota limpio y brillante, casi como una promesa de frescura. Al acercarlo, aparecen las notas de frutas rojas como cereza y frambuesa, envueltas en una mineralidad que recuerda a la tierra húmeda después de la lluvia, con un susurro floral y un toque especiado muy delicado.
En boca se muestra ágil y vivo, con esa acidez refrescante que sostiene todo el conjunto y hace que cada sorbo invite al siguiente. El alcohol está en perfecto equilibrio, los taninos son suaves pero presentes, aportando volumen y caricia al paladar. Su recorrido es largo y elegante, con un eco final que deja la memoria de una fruta roja fresca y un leve matiz amargo que aporta complejidad.
Es un vino que se mueve con naturalidad entre la frescura y la profundidad, demostrando cómo la Toscana también sabe hablar el lenguaje del Pinot Nero.
