Si te gusta la cocina tradicional, los productos kilómetro cero, vinos de la comarca y buena relación calidad precio, tienes que hacer una visita al Restaurant La Barraca de L’Ampolla en Tarragona.
Es de todos conocido que La Ampolla es un pueblo marinero encantador conocido por ser la puerta de entrada al Delta del Ebro, un paraiso natural que te animo a visitar.
Estuvimos en marzo de este año con unos amigos, justo una semana antes de que nos confinaran por la pandemia del Covid19.
EL LOCAL DEL RESTAURANT LA BARRACA
El Restaurant La Barraca está situado en primera línea de mar de la Playa del Arenal.
Estuvimos sentados en la terraza que en invierno está cerrada con una carpa para evitar el frío.
Admiten la entrada de mascotas pequeñas y educadas, en este caso, nosotros dejamos a la nuestra en casa, pero como repetiremos visita, nos la traeremos.
LA CARTA DE LA BARRACA EN L’AMPOLLA
La propuesta de La Barraca es cocina tradicional marinera con productos de temporada y según reza en su carta, los mejores de toda la península.
La verdura y la fruta es ecológica y de proximidad; los pescados y marisco del Mar Cantábrico y de las lonjas de La Ampolla, La Ràpita y Ametlla de Mar y, la carne en sitios de confianza y con la maduración adecuada.
Tienen un apartado de carnes con otro de salsas que puedes complementar con un pequeño sobre coste. No falta el Pato, Entrecotte, Solomillo de ternera, Costillas de cordero, …
En la carta no faltan la Paella marinera, el Arroz negro, Arroz con cigalas y rape, Arroz de con galeras, Arroz con verduras, Arroz con bogavante y la tradicional Fideuá.
Y el de pescados, donde no falta el Lenguado, Lubina, Rodaballo y Dorada al gusto, Graellada de pescado (para los más nostálgicos), la Zarzuela o una buena Fritada.
Además encontrarás que todos los platos están etiquetados con los alérgenos. Si tienes alguna intolerancia, es mejor que avises a la hora de hacer la reserva.
QUÉ COMIMOS EN LA BARRACA
Escogimos unos Calamares a la romana que estaban muy ricos. Las rodajas eran grandes y el rebozado estaba y nada aceitoso.
Langostinos al estilo de La Barraca, producto muy fresco con un golpe de plancha y sal gorda. Estaban brutales.
Mejillones al vapor, producto fresco que no falla nunca.
Navajas a la plancha. Estaba bien limpias y bien cocinadas. Si te gusta con limón, nada como agregarlo. Como ves, la decoración del plato, es muy de los noventa 😉
De segundo plato y para compartir entre cuatro personas, nos comimos un Arroz caldoso de bogavante que estaba de infarto.
Y lo complementamos con un Arroz con rape y langostinos que estaba de doble pirueta. Si te gustan los arroces, lázate al vacío y pide cualquiera de las opciones que tienes en la carta.
Los postres están bien, cumplen su cometido, poner la nota dulce.
LA CARTA DE VINOS DE RESTAURANT LA BARRACA
Su propuesta es corta pero con una selección de referencias de la zona.
Tomamos una botella de Petit Almodí de Altavins, un blanco joven con Garnatxa Blanca, Sauvignon Blanc y Chardonnay. La garnacha es mi uva favorita y siempre que puedo y hay en la carta, cae una.
INFORMACIÓN RESTAURANT LA BARRACA
Lo incluimos en nuestra lista de restaurantes a los que volver: buen producto, buen precio y el hecho de que admite entrada de perros.
El servicio agradable y cercano, aunque el pase de aperitivos a segundo plato un poco lentos, pero se compensa cuando llegan los arroces. Indispensable reserva si estás por la zona.
Dirección: Playa del Arenal, s/n – 43895 La Ampolla (Tarragona)
Teléfono reserva: 977460681
Horario: de lunes a domingo de 9 a 23 horas
Día de descanso: miércoles
Zona de párking: en temporada baja, es fácil encontrar sitio en el paseo marítimo.
Especialidad: arroces y platos tradicionales del Delta del Ebro
Que buena pinta. Yo suelo ir por la zona en verano, pero lo más cerca que he estado de ahí es La Ametlla de Mar. Ya tengo motivo para ir un poco más lejos 🙂
Me encanta que haya esa calidez en los restaurantes, hace que te quedes y disfrutes aún más.
Por lo que veo, platos que nunca fallan y con buen producto.
Así es, buen producto, buen servicio y un local para repetir y recomendar.