Ésta ensalada es muy ligera e ideal para cualquier momento del día, y en verano, cuando las peras están de temporada. No requiere mayor complicación y puedes prepararla en un momento, incluso para una cena improvisada.
La rúcula nos encanta y es uno de los ingredientes protagonistas en nuestras ensaladas, que hemos llegado a mezclar con casi toda la fruta, prueba con higos frescos, está riquísima!!
Utensilios:
- Ensaladera
- 1 Cuchillo
- 1 Tenedor o cuchara
- 1 Escurre verduras
- 1 Pelapatatas
- 1 bol para hacer la vinagreta
Ingredientes:
- 1 bolsa de Rúcula
- ¼ de queso parmesano
- 2 peras de agua (dependiendo de las personas, cuenta 1 ó 2 peras/persona)
- Un poco de zumo de limón (para evitar la oxidación de la pera)
- Vinagre balsámico
- Aceite de oliva
- Pimienta negra
- Miel (opcional)
Preparación:
Aunque mucha gente la utiliza directamente de la bolsa, yo suelo pasarla un agua y le retiro la humedad con el escurre-verduras, y no te cuento, si la consigues fresca …
Coloca la rúcula en una ensaladera. Pela las peras y córtalas en gajos muy finos, rocía por encima un poco de zumo de limón para evitar que se oxide (se torne marrón).
Con el pelapatatas corta escamas de queso parmesano sobre la rúcula y agrega los gajos de peras.
En un cuenco, vierte el vinagre balsámico, aceite, sal, pimienta negra y fusiona con el tenedor o cuchara (como si batieras un huevo). Vierte el aliño sobre la ensalada en el momento de servir (si lo haces antes, se te quedará mustia e impregnada, y no luce igual). Si quieres, para darle un toque dulce, puedes añadir un hilo de miel.