El fin de semana suele de disfrute para preparar cualquier plato en casa sin que las prisas te agobien y en mi caso, comer en menos de media hora. Lo que nunca falta en nuestra mesa, es una ensalada. Las solemos acompañar de cualquier plato y en cualquier estación. Los ingredientes que incluimos desde diferentes tipos de lechuga hasta canónigos, que son los preferidos de nuestra hija desde que tenía 2 años.
El sábado pasado, nuestra ensalada comenzó con unos mini tomates pera en rama que compré en Lidl hace un par de días.
El tomate (Lycopersicum esculentu) es una planta anual originaria de Suramérica que los europeos introdujeron en el viejo continente en el siglo XVI. No fue hasta ya empezado el siglo XVIII que empezó a cultivarse con fines alimenticios y de ésta hortaliza hay infinidad de variedades de todos los colores.
Los tomates que forman parte de ésta rica ensalada son tipo cherry, mini pera, de un color rojo intenso. Su aroma es pronunciado y su sabor, tiene un toque dulce.
La forma de aliñarla suele ser siempre con aceite de oliva de Arbequina y en nuestro caso de Siurana, pues consideramos que es uno de los mejores sin duda.
Si quieres que tu cuerpo te lo agradezca con una sonrisa, incluye en tu desayuno una hogaza de pan con un chorrito generoso de aceite por encima. ¡Manjar de dioses!… y si quieres probar algo realmente exquisito, aquí va algo genial y muy catalán que no todo el mundo sabe interpretar, dándole una visión totalmente equivocada a la original: pan con tomate.
Necesitarás cosas muy básicas que seguro que tienes por casa: una tostadora, unas cuantas rebanadas de pan, un tomate maduro (para empezar), un diente de ajo (si te gusta). Tuesta el pan. Si quieres un toque de ajo, córtalo por la mitad y restriégalo por encima de la rebanada. Parte el tomate por la mitad y haz lo mismo que con el ajo. Un toque de sal y un chorro generoso de ese aceite que tienes. Y sólo te queda empezar con un bocado y otro … ¡qué delicia! ¿verdad?.
Echando mano a la nevera, encontramos unos canónigos que a nuestra hija le encantan. Los canónigos proceden de Sicilia y crecen de forma espontánea en toda Europa. Su sabor es dulce y ligeramente anuezado, con un fondo algo picante en algunos brotes que hemos probado. Es fresco y algunas hojas crujientes … están muy muy ricos.
No sé si pensarás lo mismo que yo, pero empecé a ver los canónigos hace muchos años sólo para decorar algunos platos. Nos convertimos en sus fans hace tiempo y siempre hay una bolsa en nuestra nevera.
Nuestros dos siguientes ingredientes van muy relacionados: la Mozzarella de Búfala fresca otro que nunca falla. Está muy rica sin aliñar, como tentempié, pero si decides agregarla a tu ensalada, es deliciosa cuando se entremezcla en la boca con el tomate, el aguacate (que en esta ocasión no le añadimos), el aceite .. y, la Albahaca seca que me traje hace unos años de La Toscana. ¡Aún recuerdo cuando Anahi y yo la compramos!
Unas aceitunas arbequinas también acompañaron a nuestra ensalada. Si hubiéramos tenido más, podríamos haber hecho un poquito de aceituning. Quedan pendientes.
El toque frutal se lo dieronn unas tiras de naranja deliciosas que compré en mi último viaje a Madrid, que las probé en casa de Las Cosas de Cósima.
La fruta está confitada con un pequeño bañito de agua y azúcar. En este viaje me quedé tan encandilada con esta fruta que me traje también limón y pomelo. La naranja y el limón han acompañado a mis primeros bombones de chocolate, para picar entre horas y los vermuts domingueros.
Si estás por la capital, puedes ésta fruta confitada y muchas más en Frutos Secos Herranz (Calle Alcántara, 16).
Finalmente, añadimos un trozo de pepino que nos quedaba y cortamos a dados unos solomillos de pechuga a los que le dimos un golpe de plancha. ¡Se convirtió en un plato único!
Otra ensalada también muy rica que preparamos a veces lleva pulpo cocido, diferentes tipos de lechuga, cánonigos, nueces, fresas …; otra idea, añade piña natural (la tienes ya pelada y envasada en Mercadona y en Lidl mucho más barata). En fin .. como digo siempre: ¡En las cosas del comer, imaginación al poder!
La naranja con la ensalada tiene que estar de muerte. Voy a intentar ir este fin de semana porque tengo que comprar pistachos. Me acordaré de tí. Besos.
Había probado con naranja fresca y canónigos, consiguiendo un sabor diferente. ¡Ay qué ver que caprichosos son los sabores, empiezas a combinarlos y puedes conseguir resultados sorprendentes!