Contrariamente a lo que muchas personas piensan, el desayuno es la ingesta más importante del día y saltárselo es uno de los errores que cometemos más de lo que quisiéramos.
Lo malo es que, cuando ya son repetidas veces, esa falta de energía puede repercutir en nuestra salud.
La historia de su razonamiento está escrita por la Doctora Daniela Jakubowicz, reputada endocrina venezolana, autora de varios libros sobre el sobrepeso y dice tal que así
Suena el despertador y el cerebro empieza a preocuparse:
– Hay que levantarse y nos comimos ¡todo el combustible!.
Llama a la primera neurona que tiene a mano y manda mensaje a ver qué disponibilidad hay de glucosa en la sangre.
Desde la sangre le responden:
– Aquí hay azúcar para unos 15 a 20 minutos, ¡nada más!.
El cerebro hace un gesto de duda, y le dice a la neurona mensajera:
– De acuerdo, vayan hablando con el hígado a ver qué tiene en reserva.
En el hígado consultan la cuenta de ahorros y responden:
– A lo sumo los fondos alcanzan para unos 20 a 25 minutos.
En total no hay sino cerca de 290 gramos de glucosa, es decir, alcanza para 45 minutos, tiempo en el cual el cerebro ha estado rogándole a todos los santos a ver si se te ocurre desayunar.
Si estamos apurados o nos resulta insoportable comer en la mañana, el pobre órgano tendrá que ponerse en emergencia:
¡Alerta máxima!. ¡Nos están tirando un paquete económico!. Cortisona, hija, saca lo que puedas de las células musculares, los ligamentos de los huesos y el colágeno de la piel.
La cortisona pondrá en marcha los mecanismos para que las células se abran cual cartera de mamá comprando útiles, y dejen salir sus proteínas. Éstas pasarán al hígado para que las convierta en glucosa sanguínea. El proceso continuará hasta que vuelvas a comer.
DESAYUNAR: IMPORTANTE PARA ELLA Y PARA ÉL
Como se ve, quien cree que no desayuna se está engañando: Se come sus propios músculos, se auto devora.
La consecuencia es la pérdida de tono muscular, y un cerebro que, en vez de ocuparse de sus funciones intelectuales, se pasa la mañana activando el sistema de emergencia para obtener combustible y alimento.
CONSECUENCIAS DEL NO DESAYUNO EN LAS MUJERES
- Aumento de la grasa del abdomen
- Cansancio y dolores musculares (fibromialgia)
- Caída de cabello de raíz grasosa
- Hirsutismo (vellos) y acné
- Infertilidad y abortos en el primer trimestre
- Ansiedad por comer (carbohidratos) en las tardes
CONSECUENCIAS DE NO DESAYUNAR EN LOS HOMBRES
- Aumento de la grasa del abdomen
- Ronquidos al dormir (apnea del sueño)
- Colesterol y triglicéridos altos
- Verruguitas en el cuello y las axilas
- Retención de líquidos
- Dolores de cabeza, ataques de irritabilidad e insomnio
¿CÓMO AFECTA ESO A NUESTRO PESO?
Al comenzar el día ayunando, se pone en marcha una estrategia de ahorro energético, por lo cual, el metabolismo disminuye.
El cerebro no sabe si el ayuno será por unas horas o por unos días, así que toma las medidas restrictivas más severas.
Por eso, si decides luego almorzar, la comida será aceptada como excedente, se desviará hacia el almacén de «grasa de reserva» y engordarás.
La razón de que los músculos sean los primeros utilizados como combustible de reserva en el ayuno matutino se debe a que, en las horas de la mañana, predomina la hormona cortisol que estimula la destrucción de las proteínas musculares y su conversión en glucosa.
ÚLTIMOS CONSEJOS PARA EL DESAYUNO
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- Nunca salgas de casa sin desayunar. Tu organismo te lo agradecerá y compensará con mayor salud, la misma que podrás disfrutar viviendo más tiempo y sano
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- Desayuna temprano llevarás energía suficiente, la misma que te ayudará a que tu mente sea más ágil, tus pensamientos más espontáneos, tu cuerpo más relajado con mayor facilidad de movimiento y por lógica, conseguirás te estresarás menos.
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- Toma un vaso de agua recién levantada, conseguirás hidratar el cerebro perfectamente
- Si quieres tomar un zumo, que sea de fruta fresca, sin colar y sin azúcar, ayudarás a tu intestino.
EL DESAYUNO IDEAL
Cada persona sabe el tiempo que dispone para desayunar, es mejor levantarse 10 minutos antes y poder hacerlo con tranquilidad. Notarás diferencia al cabo de unos días.
No somos dietistas, pero un buen café con leche desnatada o un té acompañado de unas tostadas con aceite, un huevo pasado por agua y sobre todo el vaso de agua templada, estaría bien.
Si quieres completarlo, te dejo el consejo de Vitónica donde podrás consultar qué es lo más importante incluir en tu rutina.
Totalmente de acuerdo y me ha encantado como lo has expuesto, a ver si así nos enteramos.
El desayuno es mi comida favorita y si pudiera me tomaría todo el tiempo del mundo, por eso los fines de semana lo disfruto más, pero entre semana confieso que aunque no lo hago todo lo equilibrado que debiera, aunque hago dos 😉 , un aliciente para levantarme es pensar él.
B7ssss y buen fin de semana
Gracias Carmen por tu comentario. Recuperé el desayuno hace tres años y sí, lo mismo que tú, los fines de semana se convierten en gloria bendita y sigo con mi vaso de agua nada más levantarme. Sí desayuno, pero un poco más tarde.
Bss,
Silvia
Muy educativo, comprensible y gráfico. Que gran post!. Además, soy muy muy fan de los desayunos!. Los míos suelen ser bastante completos!
Gracias Luisa. A veces, explicando las cosas de una manera diferente, se coge a la primera.
Lo publiqué porque hasta hace tres años, era incapaz de poder desayunar recién levantada, sólo podía beber agua.
Saludos,
Silvia