Hace un par de semanas con los puntos que nos daban en una entidad bancaria, escogimos de entre los objetos una aceitera de maceración.
No tardamos ni un periquete en ir a nuestro pequeño huerto urbano (nada más que un par de macetas con albahaca y romero), coger un poco de aquí y otro poco de allá, pelar tres ajos, coger el aceite virgen extra Prólogo del Grupo Jaencoop que me regaló Jose (un compañero de trabajo) hace unos meses (por cierto, impresionante) y esperar un par de semanas o incluso algunos días para que todos los ingredientes hicieran su función.
El resultado ha sido tan estupendo que la aceitera forma parte de la bandeja donde tenemos todos las especias (curry y cúrcuma, a las que me he aficionado hace unos meses), semillas de amapola, pipas de girasol, sésamo integral tostado, pipas de girasol, los ajos y la sal con romero que compré a Espècies a la mà el pasado mes de Septiembre.
El aceite acaba siempre en una ensalada variada, para darle el toque a esa rodaja de salmón al vapor, en la pasta (spaguetti, tagliollini, …), ingrediente para hacer salsa pesto o simplemente en una rebanada de pan tostado ese sábado o domingo por la mañana que tienes más tiempo de desayunar como te gustaría.
Si tienes puntos en tu cuenta y te ofrecen la aceite de maceración, no lo dudes, es una buena elección.
Aceitera de maceración casera
Si no dispones de una, no pasa nada, sólo necesitarás un tarro hermético de cristal, aceite preferiblemente virgen extra, los ingredientes que quieras (mejor frescos) y dejarlo el tiempo para que macere.
Coloca todos los ingredientes en el tarro, cierra herméticamente y déjalo durante varios días sin hacerle mucho caso. Después de ese tiempo, puedes ponerlo en la aceitera que suelas utilizar, tenerlo a mano y nunca en la nevera.
Cuando empieces a utilizarlo, notarás el increíble sabor de tus platos.
un tipo de aceite de oliva que esta muy bueno. Enhorabuena por vuestra web.