La salsa pesto la solemos utilizar para acompañar a la pasta pero también para acompañar o aliñar otros platos desde aperitivos (en una bruschetta, estaría fenomenal), ensaladas (con una buena caprese a base de tomates y una buena mozzarella, ¡está divina!) hasta carnes y pescados.
Sabemos que la salsa pesto es originaria de Liguria (Italia) y su ingrediente principal es la albahaca fresca genovesa a la que le acompañan ajo, piñones, queso parmesano y aceite de oliva virgen (y si puede ser del bueno, mejor, más sabrosa estará).
La palabra «pesto» viene del genovés «pestare», que significa machacar o moler en un mortero, siendo ésta la forma con la que tradicionalmente se prepara ésta salsa.
INGREDIENTES
- 50 g. de Albahaca fresca
- 20 g. de queso parmesano o Grana Padano rallado
- 1 diente de ajo
- 1/2 taza de aceite de oliva virgen
- 30 g. de piñones
- un pellizco de sal gorda
PREPARACIÓN SALSA PESTO
Lava bien las hojas de albahaca y retira la humedad con un trapo o una hoja de papel de cocina. Lo que hemos hecho últimamente es meter las hojas en la centrifugadora de lechuga y quedan perfectas.
Pela el ajo y quítale el corazón si lo prefieres.
A partir de ahora lo puedes hacer de dos maneras:
Tradicional (Necesitas un mortero)
Coloca unos granos de sal y el ajo y májalos hasta conseguir que se deshaga.
Agrega la albahaca y un par de granos de sal gorda para que se tritura mejor y conserve su color verde. Cuando ya no salga agua de la albahaca, añade los piñones y maja de nuevo hasta conseguir una crema. Añade poco a poco el queso rallado y finalmente el aceite también poco a poco, para que vaya ligando todo.
Batidora
Añade la albahaca, los piñones, ajo y el queso. Cuando obtengas una crema pastosa, añade el aceite para ligarlo todo.
VIDEO PRÁCTICO: PREPARAR PESTO
CONSERVACIÓN
Para que se conserve mejor la salsa pesto que te haya sobrado, en vez de guardarlo en la nevera, introduce la salsa en cubiteras y directo al congelador. De esta manera, permitirás conservar la clorofila.
Al cabo de tres horas ya estará totalmente congelada. Es momento de poner cada cubito en una bolsa de cierre hermético y vuelve a congelar.
Cuando necesites salsa pesto para cocinar, coge un cubito y pónlo en la sartén que vayas a utilizar.